Considerada como una de las más grandes del mundo, la plaza Roja es la plaza más famosa de Moscú. Se encuentra ubicada en el barrio comercial conocido como Kitay gorod, tiene 695 metros de longitud y 130 metros de ancho.
Es inevitable viajar hasta Moscú y no pasar por este interesante lugar al aire libre que en el pasado fue escenario de importantes acontecimientos históricos. Allí nacen, en todas direcciones, las principales calles que son prolongados por autopistas hasta las afueras de la ciudad, característica que la convierte en el centro de la región y de toda Rusia.
Como dato curioso, hay que aclarar que el nombre de la plaza no guarda relación con el color de los ladrillos que lo rodean ni al comunismo, sino que deriva del término ruso красная, que en la actualidad significa «rojo», pero en el antiguo ruso hacía referencia a «bonito». Para otros, el nombre colorido de la plaza guarda relación con la sangre derramada, en el pasado, a través de las ejecuciones públicas.
Además de separar El Kremlin, sede del gobierno ruso, la Plaza Roja contiene importantes construcciones que despiertan el interés turístico como el mausoleo de Lenin, la tumba de Stalin o la enorme centro comercial de los almacenes GUM. Sin embargo, puede decirse que el gran símbolo de este lugar es la catedral de San Basilio, una edificación que llama la atención por su particular arquitectura.
Ya sea para rememorar viejos tiempos, contemplar construcciones o simplemente para tomar fotografías, la Plaza Roja constituye el escenario ideal para aquellos turistas que quieran entrar en contacto con grandes aspectos históricos, culturales y artísticos del país.
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