La Selva amazónica es uno de esos lugares mágicos, que son tan imponentes que se puede pensar que no son reales. Esta selva se ha convertido en una de las más populares del mundo, no solo por ser la más extensa, con sus 6 millones de kilómetros, sino por tener parajes ecológicos muy variados y sorprendentes.
La selva cuenta con millones de especies animales y vegetales, que la convierten en uno de los mayores conservadores de vida salvaje, además de ser considerada uno de los pulmones más grandes del mundo. La selva es tan amplia, que varios países se dividen el territorio, entre los que se destaca Brasil, Ecuador, Perú, Colombia y Venezuela.
Índice
Eco resorts de la selva Amazonica
La Selva amazónica cuenta con una amplia opción de hospedaje, a pesar que muchos piensen que por su naturaleza selvática, no sea posible encontrar hoteles de todas las categorías, que se adapten a las necesidades de los viajeros.
La mayoría de los hoteles u opciones de hospedaje, tiene un amplio respeto por el ambiente, por lo que crean espacios que no interfieran con el ecosistema y puedan ayudar a que la persona entienda la importancia del espacio verde que se habita.
Playas fluviales
La Selva amazónica llega a al mar, por lo que no es una sorpresa que tenga muchas playas increíbles. Aunque, eso no quiere decir que no sea posible disfrutar del agua en la selva profunda.
La selva cuenta con varias playas fluviales, donde se puede sentir el aire fresco, el sol y el agua de rio. Estas playas en vez de agua salada, tiene agua dulce, lo que hace que la estadía en el lugar sea mucho más refrescante y confortable.
Recorrido en barco por la Selva Amazónica
Hay muchos recorridos frecuentes en embarcaciones similares a los cruceros tradicionales, solo que con dimensiones menores, ya que se está paseando por un río y no por el mar. A pesar de esto, las embarcaciones pueden ser muy cómodas y se adaptan a los diferentes viajeros.
Los cruceros, al igual que los hoteles y posadas, tienen un gran respeto por la naturaleza y buscan estimular la conciencia del ambiente, por lo que no es una sorpresa que los viajeros tengan una comunicación directa con el río por donde pasan y con todo lo que bordea el mismo.
Los cruceros pueden hacer escalas en pequeños puertos fluviales, donde es posible saber cómo las personas de la localidad viven y como es la comunicación de estas comunidades con el ambiente.
Me encanta la selva amazonica, es una maravilla.