Luz, playa, buen ambiente, gastronomía, cultura... Alicante es una de las zonas más apetecibles del Levante español para el turismo. Cada año son millones de personas del país o internacionales los eligen la provincia valenciana para pasar unos días de verano o en cualquier otra época del año.
Pero Alicante es mucho más que la propia ciudad que da nombre a la provincia. Tal y como reflejan profesionales de la zona como MH Cerrajeros (www.mhcerrajeros.com/pueblos-alicante), el territorio está plagado de pueblos verdaderamente maravillosos en los que perderse y pasar unos días en búsqueda del relax, la reconexión con la naturaleza y el ocio.
Lugares como Altea, Calpe, Biar, Guadalest o Agres son opciones más que interesantes para comenzar a disfrutar de los mejores pueblos pintorescos de Alicante. Cada uno con sus peculiaridades y puntos a favor, sin duda todos ellos son una elección maravillosa para pasar unas vacaciones inolvidables.
Seguimos los consejos y recomendaciones de MH Cerrajeros para destacar las virtudes de estos municipios cercanos a la ciudad de Alicante.
Altea
Una de las joyas de la corona de la provincia de Alicante, pero también de toda la comunidad autónoma de Valencia. Conocido como La cúpula del Mediterráneo, ofrece un casco histórico absolutamente fascinante de casa blanca y fondo marino.
Su paseo marítimo es tranquilo, lleno de comercios y restaurantes, y las playas no están masificadas como en otras zonas de la llamada costa blanca.
Y, además, hay un bonus track para los amantes de la buena cocina: el municipio cuenta con espacios como Oustau, recomendado en la guía michelín, y que se va a convertir en uno de los referentes culinarios de la zona.
Calpe
La ermita de El Salvador es uno de los puntos turísticos más visitados del municipio. A esto se suman espacios como el castillo fortaleza o los baños de la reina, monumentos civiles de épocas romanas y medievales que hacen de este enclave un espacio lleno de Historia.
Por supuesto, Calpe también destaca por sus playas y zonas naturales de baño, que permiten que la ciudad sea un espacio donde ocio y cultura se entrelazan de una manera muy especial.
Biar
Al viajar hay que olvidar el turismo de bañador y arena. Es un municipio interior especialmente interesante para los amantes de la tranquilidad y el ocio de montaña. Biar ofrece rutas de senderismo, visitas culturales a su castillo, su santuario y su acueducto y una gastronomía muy centrada en la dieta mediterránea.
Cualquier persona que viaje a Biar no puede volver sin probar varios arroces y paellas distintas, así como una buena selección de pastas tradicionales ideales para el café.
Guadalest
Doscientos habitantes son los que viven durante todo el año en este pequeño pueblo que forma parte de los Pueblos más bonitos de España. Destaca por su entorno natural, coronado por la sierra de Aitana, que protege el municipio y le ofrece inviernos moderados y veranos suaves, ideales para un descanso lejos de las altas temperaturas que afectan al país en los meses de julio, agosto y septiembre.
Unas vacaciones en la zona no pueden pasar sin visitar su castillo, uno de sus monumentos principales, aunque también se recomienda acudir a la prisión del siglo XII y la casa Orduña, un exquisito museo decorado a la manera del siglo XIX.
Agres
La última recomendación es Agres. El municipio situado en el norte de la provincia de Alicante, está en plena sierra de Mariola. Un macizo montañoso ideal para los aficionados a las actividades de montaña como el running o la marcha.
El pueblo, de menos de 600 habitantes, destaca por su cantidad y calidad de fuentes, que permiten hacer una ruta turística por todo el casco urbano de fuente en fuente.
Estos son solo algunos de los pueblos pintorescos de Alicante más interesantes. La provincia está plagada de opciones perfectas para cualquier tipo de viajero.
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