En el centro de Toscana se alza una bella ciudad renacentista sobre la colina, a unos 605 mt sobre el nivel del mar, hacia el Sur de la provincia de Siena, el lugar predilecto para la producción de los mejores vinos y el disfrute de una exquisita gastronomía local.
Lo que en aquella época de la historia fue una fortaleza etrusca peleada por Florencia y Siena, tomada en el siglo XV por los Médicis, quienes la hicieron parte de su jurisdicción en el siglo siguiente.
Callejuelas, iglesias y hermosos palacios se mantienen en pie en el interior de las gigantescas murallas, que Don Antonio da Sangallo “El Viejo”, el gran Duque tenia esta locación como lugar de preferencia, alcanzando el rango de Sede Episcopal en 1561, siendo su principal atractivo, la zigzagueante calle de gran longitud, desde la cual los habitantes pueden llegar a cualquier parte de la ciudad de izquierda a derecha y desde Porta del Prato, en la zona sur, hasta Piazza Grande, en la norte. Esto y mucho más que ver en la preciosa ciudadela de Montepulciano, en Toscana, allá en las tierras azzurras.
Qué más ver en Montepulciano
El Santuario de la Madonna del Biagio es un majestuoso templo en cuyo interior se encuentra el gran Altar Mayor de mármol. Está situado junto a la ciudad, en el campo donde se erigen dos bellos campanarios, una de las obras maestras del Renacimiento, construido en mármol travertino por el propio don Antonio da Sangallo “El Viejo”, en el siglo XVI.
Las Iglesias de Santa Agnese y Sant’Agostino: la primera, levantada en el siglo XIV en honor a Santa Inés de Montepulciano, que tiene dentro una capilla que contiene un hermoso fresco de Simone Martini. La segunda, fue construida por el arquitecto Michelozzo en el siglo XV, destacando en su estructura una portada esculpida, muy elaborada, que representa a la Virgen María con el Niño Jesús en brazos y a sus lados, las imágenes de San Juan y San Agustín. También destaca la Catedral, con un interior repleto de obras maestras de la escultura y pintura como el altar mayor sobre el cual reposa el Tríptico de La Asuncion.
No debe faltar la visita al Museo Cívico y el Palazzo Bucelli, en este último se encuentran las famosas urnas funerarias etruscas, pero en el museo se pueden apreciar los relieves de terracota, pinturas renacentistas y de estilo gótico, dentro de una gran estructura de este mismo estilo.
Qué hacer en Montepulciano
Aunque lo mejor de este viaje es el recorrido por la ciudad, para apreciar su arquitectura, conocer obras impresionantes de la era medieval y experimentar ese estilo de vida de los años más agitados de la historia europea, nada se compara al disfrute de una rica comida típica de la región y acompañarla con un buen vino de las bodegas de la ciudad, uno de estos lugares, es el famoso restaurant La Grotta, frente al santuario, el cual se halla en un edificio del siglo XV, con un elegante ambiente y el espectacular jardín donde se acostumbra servir durante el verano.
También se puede pasear entre las casas rurales de Montepulciano Toscana, las villas privadas donde se brinda hospedaje con todas las comodidades y una gran variedad de hoteles tanto de lujo como económicos.
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